Gilberto Benítez y su familia son propietarios de un sistema agroecológico que les ha permitido una división justa del trabajo. A través de las diferentes actividades que realizan en su patio productivo, la familia puede asignar roles y dividir su tiempo entre las diferentes actividades, como lo son: la crianza de aves, producción de frutas, café, hortalizas y preparación de abonos a partir de insumos orgánicos. Gracias a la diversidad de productos, la familia Benítez goza de seguridad alimentaria y puede comercializar sus productos tanto en mercados locales como internacionales. Esta experiencia de Sistema Agroecológico ha sido estudiada y sistematizada a través de los lineamientos que plantea el Método LUME, que tiene el objetivo de estudiar el impacto que tienen las actividades agrícolas en la comunidad, tanto en el ámbito social como económico.